Un proyecto de investigación medioambiental sobre el Triops Cancriformis y su resistencia frente a los cambios climáticos y otro sobre la idea de reciclar plásticos con la especie de gusano Galleria Mellonella han sido los trabajos científicos merecedores de cuatro galardones en la XXI Exporecerca Jove celebrada en Barcelona entre los días 26 y 29 de febrero. Ambos trabajos han sido realizados por 4 alumnos de 4º de ESO del Colegio Santa María de Vila-real, el único centro castellonense seleccionado para poder exponer sus conclusiones en este certamen internacional. Además, este año también ha sido el centro español con más representación, ya que en la fase previa fueron seleccionadas 3 de las investigaciones presentadas.
Por un lado, el proyecto presentado por los alumnos Andrea López Endrino y Miguel Llorens Camarillas, de 4º de ESO, no obtuvo galardón en este certamen, aunque el mero hecho de haber sido seleccionados ya es un mérito en sí. El proyecto lleva por título «Edificio modular multifuncional” y propone la idea de convertir una zona de solares abandonados de la ciudad de Vila-real en un parque lúdico e innovador desde el punto de vista arquitectónico y medioambiental.
El segundo proyecto lleva por título «Biodegradació de plàstics mitjançant Galleria mellonella”. Sus responsables, Rubén Badenas Bernal y Alejandro Miguel Cuartiella, también de 4º de ESO, fue merecedor del segundo premio Exporecerca, que consiste en la posibilidad de asistir al encuentro de investigadores «Giovani e le Scienze” en Milán. El proyecto se basa en la construcción de un depósito de reciclaje de plástico donde los gusanos, una especie depredadora e invasora de las colmenas de abejas, son los encargados de comerse los plásticos.
Por último, Patricia Marco Gaya y Alba Serrano García presentaron la investigación en la que han estado trabajando desde septiembre. Bajo el lema «Triops Cancriformis: com sobreviure al canvi climàtic”, el proyecto toma como protagonista al triops, un crustáceo que no ha variado su forma en 200 millones de años y que, desde entonces, ha sobrevivido a cambios climáticos extremos. La hipótesis que defiende el trabajo es que esta especie ha sobrevivido gracias a la resistencia de sus huevos. Para ello, las alumnas han criado en cautividad ejemplares del crustáceo y, además, han colaborado con el CSIC de la UJI para estudiar sus características. En definitiva, este proyecto ha sido muy bien acogido por los jueces y la organización y acumuló nada más y nada menos que 3 galardones: el reconocimiento «Ciencia en sociedad”, el premio otorgado por el CSIC y el premio especial del certamen, que consiste en la presentación del trabajo en la New York Genius Olympiad 2021.